Moniciones Domingo XIV Tiempo Ordinario - Ciclo C

SOLEMNIDAD DE SAN PEDRO Y SAN PABLO

JULIO 3 DE 2016

MONICIONES

ENTRADA: Celebramos hoy la solemnidad de los santos Apóstoles Pedro y Pablo. Los dos, de maneras diversas, creyeron y siguieron a Jesús con una fidelidad total. Nos une también en esta celebración el amor filial que tenemos al santo Padre el Papa Francisco, que nos anima a orar por él y a mantenernos en comunión con toda la Iglesia. Celebremos con fe.

LECTURAS: La primera lectura que vamos a escuchar nos hablará el apóstol Pedro; en la segunda, el propio apóstol Pablo nos explicará cuál era el fundamento de toda su existencia. Y en el Evangelio vamos a oír aquella profesión de fe y de amor en la que debe reflejarse nuestra fe y nuestro amor. Escuchemos atentos.

ORACIÓN DE FIELES

A Dios, atento siempre a lo que nos ocurre y preocupa, dirijámosle nuestra petición de ayuda y socorro. Digamos confiados:

PADRE MISERICORDIOSO, ESCÚCHANOS

1.      Por la Iglesia, esposa fiel de Jesucristo, para que siempre tenga el empuje de san Pablo y la firmeza den la fe de san Pedro a la hora de anunciar el Evangelio. Roguemos al Señor

2.      Por el Papa Francisco, para que Dios le asista con su sabiduría y su fuerza en el cumplimiento del mandato evangélico de anunciar el Evangelio a todos los hombres. Roguemos al Señor

3.      Por los creyentes para que no seamos pasivos sino miembros activos y responsables de nuestra comunidad. Roguemos al Señor

4.      Por los que celebramos esta Eucaristía, para que hagamos presente un mensaje de alegría, esperanza y ánimo a todos los que esperan para trabajar por el mundo. Roguemos al Señor

5.      Por quienes sufren, quienes se cansan de tanta injusticia, quienes se ven solos, quienes no ven claro, para que no caigan en el desánimo. Roguemos al Señor

Escucha, Dios bueno, nuestras súplicas. Haz que sintamos tu mirada sobre nosotros para tener segura tu protección. Por Jesucristo Nuestro Señor.

OFERTORIO: Junto con estos dones de pan y vino, ofrezcamos al Señor nuestras vidas dispuestas siempre a seguirlo, Él nos dará la alegría para continuar evangelizando.

COMUNIÓN: Llenos de alegría por ser hijos de Dios, acerquémonos a recibir a Cristo en el sacramento de la Eucaristía.