¿Por qué tratan de matarme?

Es duro para ti ver cómo a Jesús le tratan de loco y quieren matarle a toda costa al saber que está enseñando en el templo de Jerusalén. ¿Sabes por qué? Porque dice abiertamente la verdad y acusa a los dirigentes de poner cargas a la gente y de que ellos no cumplen la ley de Moisés: «¿Acaso no os dio Moisés la ley y ninguno de vosotros cumple la ley? ¿Por qué queréis matarme?» (cf Jn 7,19).

Jesús te exhorta siempre a buscar y a decir la verdad, a cumplir con amor la Ley siempre, a pesar de lo que te pueda pasar. Lo tuyo, como él, es hacer siempre el bien, evangelizar a los débiles, liberar a los oprimidos.

Aprende a no juzgar lo que ves por meras apariencias, sino con la sabiduría de Dios: ver con sus ojos, sentir con sus oídos, hablar con sus palabras y amar con su corazón. Esta es la sabiduría de Dios, como nos indica el papa Francisco. No te quedes en las apariencias, en los legalismos. Considerar la vida desde el corazón de Dios.

Y ahora piensa: ¿cómo son tus juicios? ¿Amas, ves con los ojos de Dios que otras personas lleven una vida muy parecida a la de Jesús? ¿Te comprometes a seguir la forma de anunciar el Evangelio como Jesús te muestra hoy?

Pide esta gracia al Señor: Dame, Señor, el coraje de anunciarte. Dame tus ojos para ver como tú, tus oídos para sentir como tú, tus palabras para hablar como tú y un corazón nuevo para amar como tú. Te lo pido con el deseo de ser como tú.